jueves, 10 de diciembre de 2015

¿Y si fuera yo?

Me llamo María Magdalena.
Vivo en una aldea que se llama Zabadani, es una aldea donde lo vigilan todo,cada paso o movimiento que cagas te pueden detener o incluso matar si se enteran de que has intentado escaparte de la aldea.
En estos momentos quien sea que escape estando en guerra morira,no entiendo bien por que pero,mas o menos es por que nos quieren invadir o eso tengo entendido.
Yo llevo llevo aquí toda mi vida,ahora tengo un marido y un hijo de 21 un año.
Mi hijo esta trabajando de médico en hospital donde ayudan a las personas que se han quedado sin casa,o que estén enfermos.
Mi marido esta con la herrería trabajando desde la mañana hasta la noche.
Yo sin embargo no hago nada,aquí nos han prohibido trabajar,solo podemos las mujeres estar en casa sin salir al menos que no sea para comprar comida,debemos cuidar de nuestros maridos  y e hijos.
Un día al lado de mi casa se escucharon tiros y yo estaba con mi hijo,y yo tenía miedo por si me pasaba algo tanto a mi como a mi hijo, o mi marido que estaba trabajando.
De repente sonó el móvil de mi hijo y su voz se escuchaba preocupada,entonces me asuste.
Y yo me quede observando su rostro,cuando abrió la boca y me dijo que mi marido había muerto.
Entonces yo me quede paralizada unos segundos hasta romper a llorar,entonces en ese momento mi hijo me dijo que cueste lo que cueste iba a sacarnos de aquí.
Cuando pasaron unos cinco meses mi hijo llego a casa diciendo que íbamos a poder irnos de una vez los juntos.
Yo estaba contenta,el me dio los detalles de como iba a ser y que nos íbamos a ir hoy por la noche.
El conocía a un traficante que hacía que pudiéramos salir de aquí.
Me dijo que no los dejaba gratis por un favor que le hizo hace una semana.
Pasarón tres semana y habíamos conseguido salir de Zabadani, y estabamos en España,todo paso muy rápido,y fue todo muy difícil,pero las ganas que tenía yo de salir de allí no me las quitaba nadie.
Lo malo fue que mi hijo tuvo que volver a estudiar medicina para poder trabajar pero a él no le importaba ya que era su pasión.
Yo mientras empecé a trabajar en bar llamado la Cabaña.
Se estaba muy bien allí y el idioma lo aprendí muy rápido no era tan difícil,además estaba en la cocina así que tampoco era mucho.
Encontramos una casa después de dos años en condiciones y estabamos juntos y felices y mi hijo de echo en contro una mujer,muy guapa.
Y así fue como nos cambio la vida.

1 comentario:

  1. Estupenda historia, Magda.
    Añade una imagen de personas que buscan refugio y vuelve a leer el texto para corregir los errores.
    Saludos cordiales.

    ResponderEliminar